SENTIMIENTOS
ENCONTRADOS
Todos sabemos
que las esperas desesperan, por lo que una espera de nueve meses puede ser
agotadora. Sobre todo cuando está acompañada de tantas cosas maravillosas y complicadas
a la vez. Hay demasiados componentes físicos y psicológicos involucrados de por
medio, por lo que considero a las cuarenta semanas de gestación como la espera
más desesperante de todas.
Dice el
rezo “La paciencia todo lo alcanza” por lo que le pido a la Santa que me dé el don
de la paciencia para que nada me turbe ni me espante, y que haga el milagro en una mujer sumamente ansiosa
e impaciente.
Nada de lo que va a ocurrir en las próximas horas depende de mí. Todo
está en manos de otros, yo no tendré el control de nada, y eso puede elevar mi
ansiedad al máximo.
Entonces,
necesito una copa de paciencia y más paciencia, con un poquito de serenidad y
calma para aguantar hasta el final. Será un fin de semana largo y no por el
feriado sino por todo lo que ocurrirá a partir de hoy en adelante. Los nueve
meses pasaron, las cuarenta semanas terminaron y mi bebita tiene que nacer. Los
fuertes dolores de vientre que tengo a diario me dicen que mi hijita ya no está
cómoda y quiere salir. No sé cómo, no sé
cuándo exactamente, pero tiene que ser este fin de semana. Así está escrito.