CAMINATA
Estamos
en el segundo semestre del año. Falta poco para que termine el noveno mes del
2012. El tiempo no se detiene por lo que estoy en el último trimestre de
gestación. Tengo una linda y perfecta bebita dentro de mi barriguita, no lo
digo por presumir, sino porque estoy llegando al final de mi embarazo y las
ecografías dicen que la bebé está totalmente desarrollada, lista para salir.
Ahora
ese es el pequeño detalle, la bebé tiene que salir. Quisiera tener un parto
natural, con todo lo que eso significa, contracciones y dolor, pero hay cosas
que una no decide en esta vida, la vida las decide por una, así que no tengo
otra opción que esperar, pacientemente a que todo este perfecto para el momento
de dar a luz.
Lo que
sí puedo hacer es acudir a la infinita sabiduría popular. Por lo que otra vez
les pregunte a todas esas “señitos” que saben y saben tanto porque “Más sabe el
diablo por viejo que por diablo”. Les rogué que me contaran los trucos para
poder tener un parto a la antigua y me dieron la fórmula secreta “Camina
hijita, camina”.
Entonces,
para que mi barriga baje y mi bebé encaje, solo tenía que caminar y caminar. Ya
lo había hecho al inicio de mi embarazo. Luego que el sol se fue de Lima y yo
deje la piscina, me dedique a caminar casi dos kilómetros diarios o casi una
hora diaria, hasta que la lluvia de invierno me retuvo en casa dejando las
caminatas. He querido volver a la rutina de mis salidas diarias, pero me cohíbe
tanto el frío y me da tanto miedo resbalarme en las calles mojadas de la mañana
que ya no salgo temprano de casa. Pero eso no impide que camine en la tarde. Cuando el día se torna caliente yo vuelvo a mis zapatillas y a pasear se ha
dicho.
Cualquier
excusa es buena para caminar: el día esta hermoso, vamos a mirar tiendas, tengo
que hacer hora, hay que hacer unas compras, me falta sencillo para el pasaje,
etc. El objetivo es claro, para mejorar las posibilidades de un parto sano lo
mejor es caminar y caminar hasta reventar. Así que caminante para adelante,
camina y camina. Cuando te sientas cansada sigue caminado que la perseverancia
lo alcanza todo y en este caso la recompensa ya está en mi panza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario